PARROQUIA DE SANTIAGO APÓSTOL
LORCA


Visitas:

DICIEMBRE
L
M
X
J
V
S
D
1
2
3
4
5
6
7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30 31




| Magisterio | Santa Sede | Conferencia Episcopal | Obispado de Cartagena | Santa Biblia | Catecismo | Misa del dia | Santoral |Santo Rosario | Viacrucis | Ordinario de la Misa |
|
Horario local de Misas Liturgia de las horas | Contacto |  |


Nochebuena y la Misa del "Gallo"
La historia de las fiestas de Navidad.
Para desarraigar los restos paganos, la Iglesia primitiva Romana, con estudiada pedagogía, sustituía las fiestas paganas, y las cristianizaba. Así, el 25 de diciembre que en el Imperio se celebraba la fiesta pagana del Sol que nace, «Natalis Invicti" en el culto de Mitra, fue sustituida esta festividad pagana por la del nacimiento de Cristo, Sol que viene a iluminar las tinieblas del mundo, «luz del mundo».

LA "MISA DEL GALLO”

El Papa Sixto III, introdujo en Roma, la costumbre de celebrar en Navidad una vigilia nocturna, a medianoche, "mox ut gallus cantaverit", “en seguida de cantar el gallo”, en un pequeño oratorio, llamado "ad praesepium", "ante el pesebre", situado detrás del altar mayor. Terminada la misa, en la cual sólo comulgaba el Papa, presidía el solemne oficio de la noche en la Basílica de San Pedro. La celebración Eucarística de esta Noche Santa, comienza con una invitación instante y urgente a la alegría: «Alegrémonos todos en el Señor, porque nuestro Salvador ha nacido en el mundo».
La causa de esta alegría es el nacimiento de Cristo.  El niño que acaba de nacer, "la luz de la gloria brilló ante nuestros ojos» «iluminado esta noche santa».
En esta noche santa en la Eucaristía se nos recuerda, Cristo, nacido de la Virgen María, es el alimento de nuestro camino, para nuestra ascensión «penetrando con fe profunda este misterio y amándolo cada vez más entrañablemente» hasta llegar a gozar en el cielo el «esplendor de su gloria». Todo es un gran misterio de paz y amor.

LA NOCHEBUENA

La Navidad es, indudablemente, la fiesta que mayor repercusión ha alcanzado y tiene en la vida exterior de las gentes: villancicos, y belenes, las distintas costumbres populares, las felicitaciones, los christmas, el árbol y las cenas de Navidad. Un espíritu mezquino podrá decir que tales costumbres son en sí reprobables. Pero "si hacemos alegrías cuando nace uno de nosotros "qué haremos cuando nace Dios". Cuando una familia se alegra cada vez que una nueva cuna se mece en la casa, ¿cómo no ha de hacer fiesta solemne la familia del pueblo de Dios, la Iglesia, cuando celebra el nacimiento de su Señor y Redentor, y lleva esta alegría dulce e íntima a la vida familiar y social.